El Grupo Australia es el resultado de un acuerdo de carácter informal. Sus reuniones tienen por objeto analizar las posibilidades de hacer más eficaces las medidas ya adoptadas por los países participantes, mediante el intercambio de información, la armonización de las medidas ya adoptadas y, en su caso, la posible introducción de medidas adicionales a nivel nacional.
Todos los países participantes poseen medidas reguladoras de 89 precursores de armas químicas. Los países participantes también exigen permiso para la exportación de:
- recursos y equipos para la fabricación de sustancias químicas de doble uso, y tecnología conexa;
- patógenos vegetales;
- patógenos animales;
- agentes biológicos; y
- equipos biológicos de doble uso.
Los productos mencionados más arriba, constituyen la base de las "listas comunes de control" del Grupo, que se han ido elaborando en el curso de las consultas del Grupo Australia y que se actualizan periódicamente para garantizar su eficacia continuada. Las medidas acordadas en las reuniones del Grupo se aplican a nivel nacional, aunque todos los participantes coinciden en que serían más eficaces si todos los exportadores potenciales de los agentes y equipos químicos y biológicos pertinentes, así como los países de posible transbordo, introdujeran medidas similares. En cuanto a la naturaleza de las medidas reguladoras de las exportaciones adoptadas por los países participantes, existen algunas consideraciones que deben tenerse en cuenta:
- las medidas deben ser eficaces a la hora de poner trabas a la producción de armas químicas y biológicas;
- deben ser razonablemente baratas y fáciles de aplicar, y deben tener carácter práctico;
- no deben obstaculizar el comercio ordinario de materiales y equipos utilizados para fines legítimos.
En la práctica, constituyen acuerdos de seguimiento y control de las exportaciones: sólo se deniega el derecho a realizar determinada exportación cuando existen motivos concretos para pensar en un posible desvío a programas de armas químicas y biológicas.